Parece difícil que cuentos escritos en el siglo XX se concretan en auténticos clásicos infantiles, pero Roald Dahl tenía la clave para ello, ya que podemos situar varias de sus creaciones en dicha categoría: Matilda y Charlie y la fábrica de chocolate. Ambos llevados al cine. Ambos trasladados posteriormente a los escenarios en forma de musical con gran éxito.
Es de este último del que quiero hablaros hoy. Y es que el musical Charlie y la fábrica de chocolate se encuentra de gira por nuestro país después de una exitosa temporada en Madrid. Protagonizado por uno de los nombres con mas peso en el panorama del teatro musical de nuestro país, Daniel Diges como Willy Wonka, cuenta la historia del cómo Charlie Bucket, un niño pobre que sueña con crear dulces como su héroe, el dueño de la fábrica de chocolate de su pueblo, Willy Wonka. Pronto, la suerte de Charlie cambiará cuando consigue entrar a una visita única junto con otros niños afortunados a la famosa fábrica.
El musical cuenta con libreto de David Creig y canciones por los ganadores de varios Tonys, Marc Shaiman y Scott Wittman. A nuestro país ha llegado de la mano de la productora Lets Go, con adaptación de Silvia Montesinos y bajo la dirección de Federico Fellone. El reparto cuenta con nombres de sobra conocidos en nuestro país como Daniel Diges (Wonka), Esteban Oliver (Abu Joe), Ana Dachs (Mrs. Bucket), Javier Enguix, Malia Conde, Alex Arce… En nuestra función el papel de Charlie lo interpretó Christian Velert, que ha sido un gran descubrimiento tanto a nivel vocal como interpretativo. No podemos dejar de destacar a Daniel Diges, que está como siempre excelente y se metió al público en el bolsillo desde su primera aparición (además de dejarnos a todos boquiabiertos con cierto pasodoble), y a Ana Dachs, que nos puso la piel de gallina y derrocha ternura además de calidad. Si le tuviéramos que sacar alguna pega, es que el personaje de Charlie tiene teóricamente menos de 10 años y claro, por joven que sea Velert no aparenta ni transmite la inocencia de un niño de 8 años.
En cuanto a la producción en sí, aún estamos intentando asimilar la calidad de esta gira. El teatro Olympia de Valencia, aunque precioso, tiene el handicap de que empezó siendo un cine, por lo que tiene un espacio entrecajas (lo que comúnmente se conocería como backstage) muy pequeño, por lo que siempre es un reto montar grandes producciones aquí: suelos técnicos super empinados, quitando atrezzo no indispensable y apretándose mucho, mucho todo el elenco… No obstante, Charlie y la fábrica de chocolate cuenta con un elenco de más de 20 personas y una escenografía muy completa. Además, de unos trucos tremendamente conseguidos, que dejaron a toda la platea con la boca abierta.
El musical Charlie y la fábrica de chocolate se encontrará en Valencia hasta el próximo sábado, pero no dudéis en visitar su web para descubrir el resto de ciudades por las que pasará (por ejemplo, Barcelona en marzo).
¡No os podéis perder este viaje por la imaginación que a nosotras nos dejó enamoradas!
Comentarios recientes